¿Sabías que todos los pulpos son venenosos? Contienen toxinas en sus ventosas para paralizar a sus presas, pero tranquilos, sólo el Pulpo de Anillos Azules es letal para el ser humano. Un mini pulpo con muy mala uva que habita allá por el Pacífico.
Al no tener esqueleto interno ni externo (son todo músculo) caben por cualquier oquedad para escapar o para capturar a cualquier infeliz pececillo que intente escapar.
Vienen a poner más de 100 mil huevos en cada puesta reproductiva, la madre pone tanto empeño en proteger a sus vástagos que olvida comer y pasa todo el tiempo cuidando de su amplia camada. Una vez que eclosionan y sus pulpitos se liberan en el gran azul, la madre muere exhausta tras el gran esfuerzo. Esas madres…
¿Sabías que tienen 3 corazones? Son todo Amor.
Tienen una gran capacidad para cambiar la textura y el color de su piel para mimetizarse en el entorno, y si es necesario, son capaces de desprenderse de un brazo para escapar.
Y para finalizar…salteados con chorizo están de vicio…mirad!
INGREDIENTES (para 4 personas):
– 4 pulpitos pequeños
– 2 dientes de ajo
– 1 chorizo ibérico
– aceite de oliva virgen extra
– perejil
– sal
ELABORACIÓN:
Para comenzar, coceremos los pulpos ligeramente en agua hirviendo con una pizca de sal. No queremos que quede demasiado blando.
Cuando el agua esté hirviendo sumergiremos el pulpo un par de veces en el agua para que se vaya templando, los cambios de temperatura ayudaran en el proceso de cocción. Lo coceremos durante unos 12 minutos a fuego medio. Este tiempo dependerá del tamaño de los pulpos. Los retiraremos cuando consideremos que están tiernos. Una vez que los pulpos se hayan templado, los cortaremos en trozos y los reservaremos.
Seguidamente, cortaremos el chorizo en trozos y lo saltearemos en una sartén. No hace falta añadir aceite, el chorizo soltará toda su grasa. Una vez salteado y dorado, lo sacaremos de la sartén y lo reservaremos en un plato sobre papel absorbente de cocina.
En una cazuelita pequeña (nosotros hemos utilizado la misma donde los hemos presentado en la mesa), pondremos a refreir una picada de ajo. Cuando se empiece a dorar le añadiremos los pulpos troceados. Finalmente añadiremos el chorizo frito que habíamos reservado con anterioridad.
En el momento de llevar a la mesa, le pondremos un poco de perejil picado que le aportará color y frescura al plato. Sin duda es una combinación de sabores que jamás hubieras pensado que iba a estar tan buena. Como aperitivo está genial, y por supuesto no olvides una gran hogaza de pan para acompañar. Así que…¡¡No dejéis de probarlo!!
Quien comparte su comida, no pasa solo la vida
Hasta ahora, totalmente inimaginable esta combinación. Me la apunto, me parece ciertamente original.
Cocina de emergencia
la verdad es que parece una combinación imposible!
Tan pronto como vea púlpitos en la plaza me los traigo a casa, que pintaza tienen y aquí los tenemos de la ría y buenos, me ha encantado este plato…Bess
No he probado nunca esta combinación, me choca. pero ahora que lo dices, suena muy bien y tiene muy buena pinta. Lo de los tres corazones lo sabía, pero lo de las madres no!
Un beso
Qué pinta tiene el plato por dios!! ahora.. me dejas muerta con lo de los pulpos son venenosos 🙁
No tenía ni idea jijiji
Besos
¡Pasote!, me encanta.
Hace algún tiempo me habría sorprendido la combinación, pero en Finisterre (o Fisterra), justo en el Faro reconvertido a restaurante en el fin del mundo y del Camino, probé una cazuela de garbanzos con pulpo y un compango de chorizo y lacón que…. ¡madre mía!. Eso sí, era pulpo grandote, no pulpitos.
Esta os la copio y ya van unas cuantas.