Puntual como cada mes, os mostramos nuestro avances en la búsqueda del #elpanperfecto. Seguimos con panes sencillos, este mes les propuse a mis panarras preferidos 💖 que hiciéramos una focaccia Italiana. Es un pan plano muy sencillo de hacer en el que se emplean 5 ingredientes para su masa: Harina, agua, aceite de oliva, levadura fresca, aceite de oliva virgen extra y sal.
Es una receta con poco reposo por lo que podemos prepararla en un periquete y sin tenerlo planeado de días anteriores. En esta ocasión con romero, toda una delicia!
El procedimiento es el mismo que hemos seguido para hacer esta focaccia con tomates, aceitunas y albahaca.
Veamos el resultado:
INGREDIENTES (para 2 focaccias):
– 400gr de harina de fuerza
– 10 gr de levadura fresca
– 15 gr de sal
– 300 ml de agua
– Aceite de oliva virgen extra
– Romero
ELABORACIÓN:
Comenzaremos calentando ligeramente el agua en el microondas, unos segundos serán suficiente para poder disolver la levadura fresca. Solo tendremos que añadirla al agua tibia desmenuzada, removeremos bien el agua con ayuda de una cuchara de forma que quede totalmente disuelta.
Por otro lado, pondremos la harina en un recipiente amplio. Pondremos la cantidad de sal indicada y el aceite de oliva virgen extra. Amasaremos hasta conseguir que se integren a la perfección todos los ingredientes. Lo haremos con unas varillas eléctricas ( a ser posible).
Una vez hecha la masa, la pondremos sobre la encimera de la cocina previamente enharinada. La trabajaremos un poquito para darle forma redondeada.
Es importante que quede suave y bien integrada. Primero le daremos forma un poco aplanada para llevar los extremos al centro de forma que podamos hacerla una bola.
Una vez hecha, la pondremos en un recipiente y la dejaremos reposar durante un par de horas aproximadamente. Es importante preservarla de las corrientes de aire por lo que os aconsejo taparla con un trapo de cocina.
Veremos como tras este periodo de levado la masa a adquirido mucho volumen desprendiendo un olor maravilloso a levadura, harina y aceite de oliva. Puro olorcillo a pan fresco.
Como os hemos dicho, de estas cantidades podemos obtener perfectamente dos focaccias. Para ello, dividiremos la masa en dos y pondremos cada parte en una bandeja amplia bien extendida en la base.
La aplanaremos con ayuda de los dedos, los hundiremos en la masa de forma que vayamos dejando hoyuelos en toda la masa. Aprovecharemos estas cavidades para poner los ingredientes que hayamos elegido.
Pintaremos la focaccia con un poco de aceite de oliva virgen extra y añadiremos también sal gruesa por encima. Seguidamente meteremos la bandeja en el horno precalentado a 180ºC y lo hornearemos durante unos 20 minutos aproximadamente.
El resultado es una foccacia estupenda y llena de sabor y matices. El toque de sal y aceite de oliva virgen extra es sublime. Es perfecta para acompañar todo tipo de comidas, para tenerla hecha para una cena para toda la familia o para llevarla al trabajo.
Deja volar tu imaginación y elige tus propios ingredientes para ponerle por encima. Así que…¡¡No dejéis de probarla!!
Quien comparte su comida, no pasa sola la vida
Me encanta la foccacia y esta te va quedado con una pinta riquísima.
Hace tiempo que no la preparo…
Es un pan que da gusto comerlo así tal cual o con un buen ajo con almendras.
Unas fotos que invitan a llevarse un buen trozo.
Besossss
Muchas gracias Puri, tiene una pinta muy buena y está riquisima.
Pues si hace tiempo que no la preparas ponte sobre la marcha manos a la masa! Bss
Muy didácticas tus imágenes, no te has olvidado detalles. Focaccia, jamón, queso y cerveza fresca para una deliciosa cena frugal
Besos
Muchas gracias Norma, intento ilustrar cada receta con las fotos paso a paso para que os sea muchos más sencillo entender la receta y ver el desarrollo. Ante cualquier duda dicen que una imagen vale más que mil palabras, y esto es una buena prueba. Bss