El de york y queso te saca de un apuro. Si lo trabajas un poco añadiéndole algo más y lo pasas por la sandwichera es una cena no tan rápida.
Si lo que quieres es un bocadillo diferente, esta es una buena elección para ti.
Hemos adaptado la idea de este bocadillo originario de Nueva Orleans, llevado allí por inmigrantes silicianos y que, como la mayoría de las cosas importantes, se creó por casualidad.
Es un bocadillo a base de embutidos como la mortadela y el salami, acompañado de queso y de una vinagreta de verduras encurtidas que dan el toque final a este jugoso bocadillo.
Hemos adaptado la idea de este bocadillo originario de Nueva Orleans, llevado allí por inmigrantes silicianos y que, como la mayoría de las cosas importantes, se creó por casualidad.
Es un bocadillo a base de embutidos como la mortadela y el salami, acompañado de queso y de una vinagreta de verduras encurtidas que dan el toque final a este jugoso bocadillo.
INGREDIENTES (para 4 personas):
– 4 panes de sandwich
– 12 lonchas de salami
– 12 lonchas de mortadela italiana
– queso provolone
– 1/4 de coliflor
– 1 zanahoria
– 100 gr de pimientos asados
– 10 aceitunas verdes deshuesadas
– 2 cucharadas de alcaparras
– 1/2 guindilla fresca
– 1 cucharada de tomillo
– 1 cucharada de orégano
– rúcula y canónigos
– pimienta negra
– vinagre de vino
– aceite de oliva virgen extra
– sal
ELABORACIÓN:
Para comenzar, picaremos la coliflor y la zanahoria y las escaldaremos en agua hirviendo durante unos pocos minutos, el tiempo suficiente para que se reblandezcan un poco pero sin perder su consistencia. Una vez cocidas las pondremos en un cuenco amplio y seguiremos con la elaboración de la vinagreta.
Añadiremos bien picados los demás ingredientes, como son los pimientos asados, las aceitunas, las alcaparras y la guindilla.
Seguidamente añadiremos un poco de pimienta negra recién molida, el tomillo, el orégano y una pizca de sal. Lo aliñaremos todo con aceite de oliva y un poco de vinagre al gusto. Dejaremos esta vinagreta macerar unas dos horas en el frigorífico para que se integren a la perfección todos los sabores.
Seguidamente añadiremos un poco de pimienta negra recién molida, el tomillo, el orégano y una pizca de sal. Lo aliñaremos todo con aceite de oliva y un poco de vinagre al gusto. Dejaremos esta vinagreta macerar unas dos horas en el frigorífico para que se integren a la perfección todos los sabores.
Pondremos la rúcula y los canónigos en agua fría durante unos minutos para que se pongan las hojas tersas y pierdan algo de amargor.
Finalmente, montaremos el sandwich. Para ello pondremos en la base inferior de nuestro bacadillo unas hojas de rúcula y canónigos, encima dispondremos unas cucharadas de vinagreta y para terminar dispondremos 3 lonchas de mortadela y otras 3 de salami. Este tipo de bocadillo se caracteriza por su gran generosidad a la hora de poner los ingredientes entre las rebanadas.
Para terminar y dar un toque lácteo al conjunto añadiremos unas escamas de queso provolone, que en este caso hemos realizado con ayuda de un simple pelador de verduras. Solo tienes que deslizarlo por el queso y obtendrás estas escamas de provolone tan apetecibles.
Es diferente y aunque es un poco elaborado su resultado es un tobogán de sabores. El queso, el fiambre la vinagreta y ese toque amargo de la rúcula te sorprenderán a cada bocado. Así que…¡¡No dejéis de probarlo!!
Quien comparte su comida, no pasa solo la vida
Qué rico y sencillo! 🙂
Toma ya… no tenía ni idea de la existencia de este sandwich, pero es la bomba y me gustan todos los ingredientes… alguno va a caer viendo los JJOO.
es una explosion de sabores!