Esta mermelada de ciruelas combina tradición, sabor y nutrición en una sola cucharada. En esta receta vamos a descubrir un poco más el mundo de las mermeladas, destacando su lugar en nuestra tradición gastronómica.
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Mermelada de ciruelas: Un origen con historia centenaria
Las mermeladas tienen sus raíces en civilizaciones antiguas. Estos pueblos buscaban preservar la fruta de una estación a otra. De esta forma podían tener alimentos durante todo el año, sobre todo en las épocas en las que las inclemencias climatológicas dificultaban el cultivo. Egipto y la antigua Roma, por ejemplo, se iniciaron en la técnica de cocinar frutas con miel para lograr una conservación duradera. Aunque fue en la Edad Media que las mermeladas comenzaron a tomar forma, con la adición de azúcar como principal medio conservante. Estos jarabes espesos se convirtieron en un capricho de la realeza y la nobleza, marcando el inicio de una tradición que trasciende generaciones, llegando hasta nuestros días como un imprescindible. No solo en la repostería, también en la cocina salada.
Tradición mediterránea de la mermelada de ciruelas: Un vínculo con la tierra
Esta mermelada de ciruelas nos lleva a los bosques de ciruelos. Allí la cocina se fusiona con el estilo de vida y la conexión con la tierra. La gran variedad de ciruelas jugosas se transforma en mermeladas que capturan la esencia de la tierra a la que pertenecen. Y es que para mi, las ciruelas son un fruto casi de otoño. Son la antesala de la llegada de una nueva estación más templada que el verano.
El Azúcar como hilo conductor de la textura y conservación
El azúcar ha sido durante mucho tiempo el compañero fiel de las mermeladas. Más allá de su función de endulzar, este ingrediente mágico actúa como un agente conservante natural al ayudar a prevenir el crecimiento de microorganismos no deseados. A medida que cocinamos la mezcla de frutas y azúcar, se produce una transformación imprescindible: el azúcar extrae la humedad creando una textura densa que se desliza perfectamente sobre una rebanada de pan crujiente.
En esta receta hemos utilizado un azúcar especial para mermeladas, pero puedes usar la que tienes en casa. El resultado es el mismo.
Os explico cómo hacer mermelada de ciruelas y su receta paso a paso para que no tengáis problemas en la elaboración. El éxito está garantizado.
Si tienes alguna duda, puedes preguntar lo que necesites dejando un comentario al final de la receta. También puedes contactar conmigo a través de Instagram, en mi perfil Zafranelas publico cada día cosas nuevas.
Mermelada de ciruelas, receta sencilla para no cometer errores
Ingredientes para hacer mermelada de ciruelas
Cómo hacer mermelada de ciruelas
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Comenzaremos pelando las ciruelas para evitar que la mermelada nos salga demasiado ácida. Una vez peladas las cortaremos en trozos y los pondremos en una olla a fuego suave. Retiraremos también el hueso de las ciruelas.
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Añadiremos el azúcar y lo dejaremos al fuego durante unos 45 minutos aproximadamente. Es fundamental que el fuego esté al mínimo para que no se acabe agarrando al fondo de la olla la mermelada. Iremos removiendo de vez en cuando y no dejaremos de vigilar durante todo el proceso.
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Finalmente, lo pasaremos todo por la batidora para dejar la mermelada bien fina, aunque si lo prefieres puedes dejarla tal cual te resulte. El resultado es una mermelada suave, melosa y cargada de sabor.