Los espaguetis en salsa de piquillo son una opción práctica y versátil para incorporar sabores tradicionales a un plato de pasta. La receta utiliza pimientos del piquillo, conocidos por su sabor ligeramente dulce y ahumado. Aunque suelen emplearse en rellenos o como guarnición, en este caso se transforman en una salsa cremosa que combina bien con la textura de los espaguetis.

Este plato destaca por su sencillez y rapidez de preparación. Esto lo convierte en una alternativa eficiente para comidas cotidianas. No se trata de una salsa de tomate convencional ni de una carbonara clásica, sino de una propuesta diferente que aporta variedad al recetario habitual. El tiempo estimado de elaboración es inferior a 45 minutos, lo que facilita su integración en menús diarios o en ocasiones informales.
Si te gustan los espaguetis, estas son tus recetas
Entre las propuestas más destacadas están los espaguetis frutti di mare, perfectos para los amantes del marisco, los espaguetis con alcaparras, que aportan un toque salino y sofisticado. Sin olvidar los espaguetis con bacon y cebolla.
También puedes optar por versiones más ligeras como los espaguetis veganos con pistachos o los espaguetis a la crema con boletus.
En cuanto a tallarines, puedes visitar recetas como los tallarines con gambas al ajillo. O los tallarines salteados con verduras, ideales para una comida equilibrada, y los tallarines con queso feta, una propuesta sencilla y sabrosa para cualquier día de la semana.

Espaguetis con salsa de piquillo
Os explico cómo hacer espaguetis en salsa de piquillo y su receta paso a paso para que no tengáis problemas en la elaboración.
Guarda esta receta en la pantalla de inicio de tu móvil para un acceso rápido. En la sección de ingredientes, selecciona los que necesitas para simplificar la compra. Además, ajusta el número de porciones deseadas y las cantidades de los ingredientes se calcularán automáticamente.

Espaguetis en salsa de piquillo: sabor que reconforta
Descripción
Estos espaguetis en salsa de piquillo son una forma deliciosa de darle un giro a la pasta de siempre. La salsa, hecha con pimientos del piquillo, nata y un toque de ajo, es suave, cremosa y con ese sabor ligeramente dulce que la caracteriza Es una receta que no necesita ingredientes raros ni técnicas complicadas, solo ganas de cocinar algo rico y compartirlo. Ideal para una comida rápida entre semana o para sorprender a tus invitados con algo diferente.
Ingredientes para hacer espaguetis con piquillo
Cómo hacer espaguetis con piquillo
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Pon a hervir abundante agua con una pizca de sal. Cuando rompa el hervor, añade los 300 g de espaguetis o tallarines. Remueve al principio para evitar que se peguen. Cocina según el tiempo indicado en el paquete (normalmente entre 8 y 10 minutos). Una vez listos, escúrrelos y reserva. Puedes guardar un poco del agua de cocción por si necesitas ajustar la textura de la salsa más adelante.
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En una sartén amplia, añade 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra. Pela los 4 dientes de ajo y córtalos en láminas finas. Sofríelos a fuego medio hasta que estén dorados, cuidando que no se quemen. Añade el contenido del bote de pimientos del piquillo escurridos y rehoga durante unos 3 minutos para que se integren bien con el ajo.
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Agrega las 2 cucharadas de concentrado de tomate a la sartén y mezcla bien. Este ingrediente intensifica el sabor y da cuerpo a la salsa. Cocina durante 2 minutos más para que se integren los sabores.
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Pasa los pimientos, el ajo y el tomate a una batidora o procesador de alimentos. Añade los 200 ml de nata para cocinar, 1 cucharadita de azúcar (para equilibrar la acidez), una pizca de sal, y 1 cucharadita de orégano seco. Tritura hasta obtener una salsa homogénea y cremosa. Si queda muy espesa, puedes añadir un chorrito del agua de cocción de la pasta.
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Vuelve a verter la salsa en la sartén y caliéntala a fuego suave durante 2 minutos. Añade los espaguetis cocidos y mezcla bien para que se impregnen de la salsa. Remueve con cuidado para que toda la pasta quede bien cubierta.
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Sirve los espaguetis en platos hondos. Espolvorea con perejil picado al gusto y, si lo deseas, añade queso rallado por encima. Este último es opcional, pero aporta un toque extra de sabor y cremosidad.