Ni que decir tiene que esta es una receta muy sencilla que apetece sobre todo en épocas del año donde hace calor, ya que es cuando nos apetece platos sencillos y con el mínimo cocinado posible. Nada mejor que un plato fresco para apaciguar los estragos de las altas temperaturas.
Lo primero que vamos a hacer es cocer las patatas, las pondremos en una olla amplia con agua y las dejaremos cocer unos 35 minutos aproximadamente.
Al mismo tiempo coceremos los huevos, los pondremos en un cazo cubiertos de agua al fuego. Se cocerán en unos 10 minutos aproximadamente. Es importante cocerlos a fuego medio.
Una vez que tengamos las patatas y los huevos cocidos y se hayan enfriado, los pelaremos y los trocearemos. Las patatas las partiremos en trozos medianos, y los huevos los cortaremos en gajos. Quedan mucho mejor si los cortamos con el típico cortador de huevos cocidos, ese que los corta con unos alambres tensados en una estructura.
A continuación, pondremos todo en un recipiente amplio y le añadiremos la cebolla y el perejil que habíamos picado con anterioridad.
Para finalizar ya sólo nos quedará aliñar con el aceite de oliva virgen extra, el vinagre y la sal.
Espero que te haya gustado, que la disfrutes y no olvides valorar esta receta! Aquí abajo tienes las estrellas, me sería de gran ayuda saber tu opinión.