Las pechugas son un recurso muy utilizado en los hogares por su gran versatilidad. Admiten cualquier tipo de recetas, por lo que será muy sencillo improvisar platos con los ingredientes que tengamos en casa. En esta receta os voy a contar como tener en poco más de 30 minutos una pechuga de pollo a la mostaza. Sencilla, rica y sana.
Como os comentaba, la pechuga es la parte más noble del pollo. Es una carne magra, con muy poca grasa por lo que es perfecta utilizarla en dietas de adelgazamiento y en dietas con alto contenido proteico.
La pechuga de pollo es una carne muy sana, natural, asequible y muy versátil. Quizás pienses que tiene poco sabor, lo cual es cierto, pero eso es parte de su encanto. Por ello es ideal para combinar con infinidad de ingredientes.
A diferencia de las carnes rojas, con un consumo recomendado más ocasional, lo recomendado es comer pollo tres veces por semana. Por tanto, resulta ideal experimentar con ellas y aprovechar todas las oportunidades que ofrecen. La carne de pollo es, además, una de las preferidas de los más pequeños de la casa. Esto es algo que nos facilitará el menú diario.
Para añadir más sabor a la carne, puedes macerarla o añadir muchas especias. Por ejemplo, en escabeche me encanta, es una forma sencilla de tener unas pechugas de pollo cargadas de sabor. ¿Has probado el pollo al vapor? Es una autentica delicia, sobre todo para tenerlo preparado y usarlo en ensaladas.
Si quieres saber un poco más de los platos de pollo que suelo preparar, puedes visitarme en el perfil de Instagram @zafranelas. Allí podréis encontrar siempre nuevas recetas con las que sorprender a tus comensales.
Pechuga de pollo a la mostaza
Qué necesitas para hacer pechuga de pollo a la mostaza
Cómo hacer pechuga de pollo a la mostaza
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Comenzaremos picando muy pequeño los dientes de ajo y la cebolla. Las cantidades son orientativas, si por ejemplo te gusta más el sabor del ajo que el dulzor que aporta la cebolla, puedes añadir más dientes de ajo.
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Pondremos una olla al fuego con aceite de oliva y añadiremos el ajo picado primero, de esta forma el aceite se impregnará de todo su sabor. Seguidamente añadiremos la cebolla y un toque de sal.
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Cuando veamos que las verduras comienzan a dorarse añadiremos el vino blanco y subiremos el fuego para que se evapore bien todo el alcohol.
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Mientras, habremos marcado los filetes de pechuga de pollo en una sartén con un poco de aceite de oliva. No es necesario que las cocines por completo, solo tienes que dorarlas, que queden bien marcadas y selladas para que no suelten los jugos. Se terminarán e hacer en la salsa de mostaza.
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Una vez que el alcohol se haya evaporado, añadiremos las cucharadas de mostaza y medio vaso de agua. Mezclaremos todo bien y por último pondremos encima los filetes de pechuga de pollo que previamente habremos marcado en una sartén, como os comentaba antes.
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Rectificaremos de sal y taparemos la olla. Cocinaremos durante unos 20 minutos aproximadamente a fuego suave. Y ya están listas! Presentaremos con un poco de hierbas frescas picadas por encima, perejil por ejemplo.